jueves, 31 de enero de 2008

Oliveiro, Bob, esponjas, absorvencias


Hoy Oliverio me decía: "Nunca sigo un cadáver, sin quedarme a su lado/ cuando ponen un huevo, yo también cacareo/ basta que alguien me piense para ser un recuerdo" Y yo decía qué genialidad del tipo, porque yo tantas veces he ladrado cuando he visto un perro, o destilé frente a un vaso de alcohol ¿Cómo puede un tal OLiverio, un tal Girondo, así como así, sentir lo mismo y encontrar las palabras que yo creía que eran mías. (aunque es evidente que en composición son de él) y adelantarse como un Nuñez Cabeza de Vaca.
Yo hubiera dicho en vez, soy una esponja, una absorvente substancia, un papel secante, y hubiera virado así al fenómeno físico de la absorción de una materia (líquida) por otra; y hubiera caído en una cuchilla de clichés como de un videojuego. Cuchilla que sale y se esconde, sale y se esconde, y ahí cuando sale, Chin- el zarpazo, letal = muerte= mundaniedad= falta de ser específico.
Pero él ha sido tan poeta, que hasta me da verguenza tener que admitirme tan lejos.

viernes, 25 de enero de 2008

BANANAMANIA


Hola gente, hoy me dieron muchas ganas de postear algunos subrayados del libro de Banana Yoshimoto, Kitchen,porque valen la pena. Esta autora genera todo un movimiento de fanáticos en Usa e Italia.

Banana prefiere las líneas rectas de un texto que conduzca al meollo de la cuestión, antes de perderse divagando en vueltas, rulos y figuras arabescas.
La literatura japonesa, no es fácil de entender, es una cuestión de esfuerzo mental para profundizar en esa superficie simple y descubrir que debajo de esas letras hay una filosófia encerrada, hay metafísica. Quizás sea heredera de la tradición oriental, quizás de lo sigiloso de esa gente profunda, lo cierto es que banana , nos emociona con personajes tristes, con vidas aún más tristes.

Mikage, el personaje principal de Kitchen, es salvada por la cocina primero y por el amor después. La cocina constituye ese fetiche donde la persona tiene el poder de crear, de materializar los sentimientos en ingredientes, que luego son mezclas que devienen en platos.
Pero quedarse solamente con esta autora, por la sensualidad de ese ámbito tan atribuido a lo femenino es ser injustos. Porque Banana es una autora profunda, reflexiva, que entre líneas nos dice mucho más de lo que podemos leer en un texto tan limpio.
Moonlight Shadow, es el otro relato del mismo libro, y en él lo fantástico es u onírico o religioso. No lo sabemos, pero lo aceptamos, porque Banana ya nos conquistó desde sus primeros párrafos y es difícil resistirse… “Porque (esas palabras ) brillaron muy fuerte y me deslumbraron”
Acá unas lineas:


Una persona que quiere independizarse tine que cuidar de algo, de niños, de plantas, de algo. Así, conoce sus propios límites. Este es el principio de todo.



-EL MIEDO HACE QUE LAS HORMIGAS PAREZCAN ELEFANTES.



Una persona tiene que estar completamente desesperada una vez en su vida, y entonces sabe a qué cosas de sí misma no puede renunciar. Si no, llegará a la madurez sin saber lo que es realmente importante.


Las personas no se dejan vencer por las circunstancias o por fuerzas que vienen de afuera, sino por las que nacen en el interior de sí mismos.



Es importante el viajar para una escritora, porque el estar tanto tiempo en casa aletarga la mente. Es importante ver situaciones donde las cosas no van como uno quiere , donde uno no se siente a gusto, o estra antes paisajes espectaculares, o despedirse de alguien con quien se compartió. (Entrevista telefónica con Revista Ñ)

"Fue sólo un instante, pero esas palabras me transtornaron, porque brillaron muy fuerte y me deslumbraron . Acabaron calmando mi corazón.

"En el fluír muy incierto del sentimineto y del tiempo, tenías diferentes recuerdos grabados en los cincos sentidos. Así, reviví en aquella confitería de invierno, lo inrremplasable, que por lo demás eran cosas muy triviales."

..La comida también emite luz y al comerla se apaga.
He aquí una foto de mis amigas orienteles, Galaxy, Flower, en la cocina.

domingo, 20 de enero de 2008

Noche de Jazz



Una voz que es mujer, de vez en cuando se balancea mientras es Sinatra, Vinicius o Sarah Vaugh.
La cantante abre su boca y saltan cintas rosas y plateadas que la contornean y terminan por enredarla. Un re sostenido, seguido de un la más enérgico quizás. La música se convierte en un sólo tirabuzón de cintas.
Es que el jazz tiene mucho de gato que pasea por el tejado, que se detiene melancólico y vuelve a empezar su marcha triste pero a su vez seductora.
De su boca salen pájaros de colores, que se asientan en las cabezas del público, aladas, de plumajes pardos o cromáticos.
Luego vendrá una bocanda mayor, en un esfuerzo mayor por modelar la frase, y saldrá un jabalí rojo y un ciervo por detrás y de pronto el café es un Arca de Noé, donde caminan los animales que los músicos van dejando escapar. Hay peces también que salen cuando la cantante frunce los labios de corazón.
Y es un gran acuario, o un gran zoológico y ella se convierte en Diana, diosa pagana de la caza. Porque antes de terminar, ayudada del bajo que la mira de reojo, y la acompaña, deberá llevarse la fauna dejada al aire y devolver al café la seriedad de un día martes.
Gracias por venir y aquí tiene la cuenta.
Si no fuera por los testigos pensaría que no pasó nada, una vez que la cantante que ahora es más pequeña saluda y se marcha por la puerta del costado.

sábado, 19 de enero de 2008

Estilos de verano



Modas + metonimias de atuendos

Problemas de Tocayos


Hay tocayos inofensivos , como por ejemplo un Rubén Darío, del poeta o un Luis Miguel del Tocayo del cantante; no presentan amenza. Pero cuando el mundo concibe un Francis Bacon filósofo del siglo XVI, que crea su Instaurtio Magna, y sus consideraciones metafisicas y lógicas alteran la racionalidad de las hormigas de la urbe, y por otro lado un Francis Bacon, cuatro siglos más tarde que pinta la figura humana como ninguno, las cosas comienzan a complicarse.
Claro que siempre le queda el consuelo a Freud , a Sigmund, de que su alter ego no tenga el mismo nombre, se llama Lucian. O a Rousseau de que Henry sea Henry y no Juan Jacobo; o a Borges de que Graciela sea Graciela y esté tan lejos de su genialidad de que nadie se anime a preguntarle si son parientes.

viernes, 18 de enero de 2008

Multiculturalismo


Nunca vayan a la playa con una japonesa tahitiana, china o coreana. Son las más aburridas. No quieren tomar sol, se la pasan buscando la sombra, la sombrilla, el silencio y la oscuridad.
Quieren vivir el Monasterio dentro de la playa. Les gusta la playa en lo que no tiene de playa, en lo que se le parece a la ciudad.
Practican Yoga desde que llegan, hasta que se van y ejercitan su paciencia oriental, cada vez que nos ven buscar el tostado del día.
No, gente. Hay que amar la diversidad, por lo que retiro lo dicho. No seamos prejuiciosos, queramos a los hermanos, aceptemos las diferencias, y seamos multiculturales, pero nunca vayan a la playa con una japonesa, tahitiana, china o coreana.
Acá un dibujito recién hecho.